Devenir rama

Falsas Escisiones

Me propongo hoy reflexionar sobre la separación cuerpo / mente. Esta escisión se niega (nos impide) ver a ambos, cuerpo y mente, como expresiones abstractas del continuum de la existencia; dos instancias nombradas de un único proceso; dos boyas flotando en el infinito e infinitesimal océano de la existencia humana.

El que mucho aprieta

Llevo la vida entera en una cruzada contra esta falsa escisión. (Autointerrupción: las escisiones conceptuales son todas falsas y a menudo útiles, pero insisto en este caso particular porque el lenguaje es el mapa que nos configura interiormente. El lenguaje es un mapa que se constituye en condición de posibilidad de la experiencia. Necesitamos actualizar el mapa para que sea posible experimentar otro territorio, otro cuerpo)
Decía que peleo con esta división, y no fue algo que eligiera conscientemente. Desde temprana edad, mi exploración del mundo se resistía a ser compartimentada. Hasta el día de hoy me resulta incómodo, cuando conozco a alguien nuevo, contarle acerca de la multiplicidad y diversidad de mis actividades. Lo hago de a poco, intentando gambetear prejuicios que vienen por el lado de “El que mucho abarca poco aprieta” y pensamientos del orden: “¿Èsta qué se cree? ¿Que puede hacer todo lo que quiera?” Honestamente, la respuesta es sí. Puedo por lo menos intentarlo, y siempre voy a por ello.

Discurso del análisis

En el mundo estable del discurso hegemónico, “sí, ese que no acaba de desarticularse por mucho que se cuenten por decenas de miles las personas que han dedicado su vida entera a tratar de hacerlo”✴︎ los saberes e intereses existen de manera compartimentada y jerarquizada. Todo separado y rotulado, para un conveniente análisis y control. Pero ese discurso no es más (ni menos) que eso: una acumulación de convenciones y construcciones que se refuerzan a sí mismas en la medida en que viven en una gran cantidad de gente y sus decisiones cotidianas.
No me interesa izar una bandera anti esta tradición compartimentadora. Soy además consciente de sus logros y virtudes, sobre las que no me explayaré acá. Quiero simplemente recalcar su carácter ficcional-convencional para poder abrir espacio a otros modos de nombrar (y por ende experimentar) el continuum que nos abraza y abrazamos. Es imprescindible y urgente especialmente allí donde este discurso heredado del siglo pasado y la revolución industrial genera padecimiento y frustración.

¿Es o se hace?

Vuelvo a mí (cómo evitarlo, siempre es más fácil ser honesto basándose en la propia experiencia). Si bien he trabajado de bailarina e intérprete, de fotógrafa y editora de videos, he grabado discos, compuesto canciones y tocado en una banda por 10 años; no soy netamente ninguno de los rótulos que suele corresponder a cada una de estas actividades. Nunca pude decidirme. Créanme, la presión existió y existe. El pensamiento que la apuntala es que si me dedicara sólo a una actividad, la haría mejor. Más allá de la disgresión que se me presenta aquí en forma de pregunta: “¿Por qué querría yo hacerla mejor?”, que da para debatir largo y tendido y agregando que hago todo lo que hago lo mejor que puedo y con entusiasmo; mi punto es que ese pensamiento está errado.
Ya con 31 años son muchas las veces que noté cómo mi diversidad de intereses y la cualidad multifacética de mi formación (en gran medida autodidacta e informal) enriquece a cada actividad que encaro (la mejora?). No es difícil imaginar por qué el haber sido baterista influye en mi actividad de editora de video: ritmo, acentos, intensidad, velocidad. O que mis ávidas y curiosas lecturas informan (dan forma) a cualquier labor o proyecto que encare, incluidos bailar, fotografiar y cantar. La amplitud de mis intereses me permite conectar con muchos contenidos distintos a la hora de trabajar para su efectiva comunicación. En la experiencia de cada técnica y oficio en particular registro matices y detalles que luego traslado a lxs otros, haciendo más difícil que me hunda en el hastío por la repetición. Es imprescindible mantenerse interesado, y a mí el diálogo entre disciplinas me ayuda a eso.
Lo que quiero decir es que soy “mejor” editora – cantante – bailarina – escritora -fotógrafa- realizadora precisamente por no ser exclusivamente eso. Detallo: no soy “mejor” en un sentido objetivo. No “mejor” que lxs otrxs sino que una versión de mí privada de su multiplicidad.

Hamacáte

Me queda agregar que la razón principal por la cual me agradezco no haber sucumbido a la fuerza compartimentadora es que vivo mejor. Para ilustrar el modo en que siento que la atención y dedicación al cuerpo alimenta a la mente y viceversa; imagino el arco que dibuja un péndulo en su trayectoria. Hay una relación de simetría entre los vértices, no puede el péndulo ir con más fuerza o más alto hacia uno que hacia el otro. Cada uno necesita del otro porque sin éste no habría vaivén y es bien sabido que la vida no es otra cosa que hamacarse.

✴︎Claudia Faci - Prólogo de Asymmetrical Motion (Condró-Messiez)